viernes, 13 de noviembre de 2009

Previo dilema

Siempre me encuentro en un dilema. Quizás como toda mi existencia debo considerarla complicada. No sé a dónde ir.

¿“Huesos o músculos”?. De un extremo a otro buscando quien me cobije quien me haga sufrir. Es tarde; me acostumbre a tener que saborear dolor para sentirme viva. Qué sentido tiene el estar de pie frente a un gran espejo teniendo delante mío una maquina de pesas. Mirándome contemplando la pesa que acabo de dejar firme en su sitio. Qué sentido tiene seguir viviendo así ocultándome entre tanta gente queriendo llegar a algo de lo cual sin querer me prohíbo. No lo puedo evitar. Me siento culpable de comer. No puedo creer que antes me costaba tanto dejar de comer, ahora no quiero y me siento mal si no lo hago.

Me deprimo porque llego al gym y no tengo fuerzas ni para llegar a diez ejercicios con una pesa que ni siquiera tiene el peso mínimo. Es duro pero es real. Antes quería verme tan delgada. Me fascinaba pensar que algún día llegaría a mirar más de cerca mis costillas. En ese entonces sentía esa meta a largo plazo y tan difícil.

Hoy debo de comer si quiero ver músculos y no dará resultado si no me alimento bien. No sé qué comer y eso también me angustia. Me restrinjo tanto. Mi profe me dijo que comiera de todo. Yo quiero y lo necesito, pero no puedo. Mi mente esta programada a pensar que subir unos kilos más me veré obesa. Es que hay algo que no he dicho aún y me carcome. Me veo gorda.